La vida es así, despierto pensando en ti
y todavía dices que te sientes sola.
Sé que ansias la caricia constante ,un beso con ganas
y te ofrezco mi mundo limitado
seguro del mayor amor ,ese amor que llevamos siempre callados
sin que nadie advierta su tamaño,
‘siempre pendiente de tu vida
sufriendo tus pesares, justificando tus caprichos
¡Que hermoso verte sonriendo para mí.!
No se confunde mi costumbre
pues sé que estoy fuera de lugar
sabes que me entrego por tu consecuencia! Sea cual sea!
y mi mente asume tu problema como faena inmediata,
¡es tanta mi devoción por ti!.
Te he mirado una y mil veces ,obsesivamente
y tu piel tentadora,!Caliente!
despierta el interior de mi codicia;
Besarte infinitamente por todo tu cuerpo,
sacarte el gemido deseado,!Abrazarte fuertemente!
para que no te escapes de la escena hirviente
dónde mi fuego no se apagara porque tu leña es única,!Necesaria!
No te asustes, tan solo lo he pensado,
he aprendido a vivir sin mis fieles afectos.
En cambio nunca dudes de tu esplendor
te sobran las vistas de tu conciencia;
Esas vistas de mujer fastuosa, dulce, atractiva
que invita al hombre a saciar inmensidades.
Yo te amo ,con mi estilo
sin tenerte voy mas allá ,velando tu descuido
soy tu amigo,!Soy tantas cosas!
soy tu coraza ,aunque no me veas ni me sientas
que importa?,lo importante es existir en aras de algo
peor es él vacío, y no tener que imaginar.
Pero nunca padezcas la soledad
y mucho menos te niegues escuchar una expresión cándida
yo te la daré sin precio, a cambio de que seas feliz.
Yo soy tu amigo también un hombre,
Un hombre acostumbrado a la paciencia, de saber esperar las fantasías.
No te atormentes, se que puedes entender
me lo demostraste un día sin tanto reparo
y me enseñaste que para flotar no necesitamos ser nubes….
Me hiciste mortal, con tu respiración.
Que seré para ti? ¿Cuánto me podrás querer?
tal vez nada o un poquito, o ni tu misma lo sabes;
Si pudiera una palabra decir todo,
¡todo lo que ambicionamos! O sencillamente queremos percibir.
Eso si, no me veas lejos
ni creas que te asedio, con mi franca exposición
cuando estamos solos, hasta la sombra nos molesta
y no vemos el abrigo que concede la razón.
No olvides que en mis versos tan sencillos
tu fábula siempre tendrá un lugar
recuerda que en la calma vive la prudencia
aprende a convivir con la verdad.
No te apures, déjame terminar mi sermón
si sabes cuanto te quiero no es difícil mi pasión
mi pasión no te daña, en todo caso te abriga
aquí tienes el cariño y un poquito de ilusión.
Copyright © 2002
No hay comentarios:
Publicar un comentario